Antes de morir, Yarin le encomienda a Ram una última misión: asesinar a Pink. Al mismo tiempo, Ram se entera de la muerte de Num y el remordimiento comienza a perseguirla, mientras Pink intenta reconfortarla.
Cuando Patti dispara contra ambas, la violencia desata un giro definitivo y una de ellas enfrenta consecuencias irreversibles que cambiarán sus destinos para siempre.