Antonio Santos y su mujer perdieron a su hija hace ya más de diez años en una playa española cuando la pequeña solo tenía 5 años y él no deja que la esperanza de dar con el paradero de lo más importante de su vida desaparezca también con el tiempo, pero las consecuencias de sus actos pueden salpicar a mucha gente.

Precisamente, en aquel momento el matrimonio de Antonio e Inma se vio afectado por la investigación, ya que no querían seguir el mismo rumbo y parece que ahora esas personas a las que querían encontrar para tener nuevas pistas le han llevado a cometer un delito en Colombia, pero Angelita, la abogada, no quiere que entre en una prisión tan peligrosa como "La Brecha".

Eso no es posible y él entra en esa cárcel en la que las reglas son otras y el riesgo es extremo, pero está dispuesto a todo y lo primero que quiere hacer es dar con Cruz, un recluso que tiene un ojo de cristal y mucha información sobre Soledad. Inma, desde España, descubre también una nueva pista.