Tino y Javier llevan al camping a Rubén, un joven indigente al que le salvan la vida evitando que se suicide. La gran sorpresa es que, al llegar, se da cuenta que allí viven las personas que le causaron la ruina y ahora tiene la venganza al alcance de la mano.
Los dos hijos del matrimonio Colmarejo, Dulce y Javi aprueban el ingreso a la universidad. El problema es que no tiene dinero para pagar los estudios de los dos. Si la situación de tener que elegir a cuál de sus hijos costearle los estudios, la situación se hace más difícil cuando a uno de ellos se le ocurre conseguir el dinero por su cuenta y termina preso.
Ángel se entera que Chus y Alicia, las dos más chismosas del camping, saben que él se besó con Begoña y entra en pánico de que llegue a los oídos de Sandra y que esta lo deje. Por eso se dispone a hacer lo que sea para impedir que ella se entere.