Estela, Eugenia, Vera y María José rinden declaración ante Maira, la periodista que investiga el caso con creciente intensidad. Mientras tanto, Ventura intimida a Dayana, intentando silenciarla, y Odair se disculpa con María José por errores del pasado.
Las víctimas se unen en una sola voz y testifican contra Roger, el polémico terapeuta en el centro de la tormenta. En medio del caos, Vera da a luz a su hijo, trayendo una nueva vida mientras otra se apaga: Gloria muere, dejando un vacío irreparable.
Roger, acorralado pero aún manipulador, comienza a buscar desesperadamente a Carolina. Pese a su silencio público, Susana le consigue una entrevista exclusiva. Durante la conversación con Maira, Roger se victimiza, se compara con Cristo y culpa a sus pacientes, alegando que lo acusan por frustraciones personales.
La presión sobre Maira crece cuando Susana le informa que la noticia ha sido filtrada y le exige entregar el reportaje de inmediato. Desbordada por la urgencia, Maira deja a su hijo Martín dormido en el auto mientras corre a la redacción. Sin embargo, una tragedia la golpea: al regresar, encuentra a Martín inconsciente. El niño se ha ahogado en el vehículo, y Maira, devastada, enfrenta su peor pesadilla.
En paralelo, Clarisa encara a Roger en una confrontación que deja en evidencia las grietas profundas de su discurso.