Adriana se ve obligada a vivir en un centro de menores después de que su padre, Gerardo, sea internado en un psiquiátrico. Para evitarlo, la joven decide escaparse en el desván, donde se encuentra con Joel. Por suerte para ella, el joven decide ayudarla. El problema es que Joel no cae en que es noche de luna llena y la oscuridad le sorprenderá en el bosque.

Por otro lado, Sara decide llevarse a Leire lejos de Calenda después de que la secuestraran. No está dispuesta a que su hija viva en constante peligro. Aunque su marcha es difícil de superar para Joel, sabe que es lo mejor para ella.

Mientras tanto, Fernando no quiere seguir disfrutando de su relación con Olivia mientras su hijo sufre y, por ese motivo, decide dejarla.

Nacho y Vera, en cambio, sí que están dispuestos a luchar por su amor, a pesar de que verse y estar a solas es una tarea muy difícil.