Los chicos llevan unos días viviendo solos y una vecina de Ricky, al percatarse de ello, advierte a la Guardia Civil de lo que sucede, por lo que Nacho se llevará detenido a Ricky, donde se encuentra su hermana.

La situación es difícil y él volvería al reformatorio, ya que una asistente social también va a encargarse de Lucía, si alguien no lo impide. Esa persona es Elena, madre de Ricky y la pequeña, que tiene una alternativa que ofrecerles. ¿Cuál es el trato? ¿Le permitirán llevarse a sus hijos?

Elena tiene mucho que contar y Murillo puede lograr la respuesta a las preguntas que intentan contestar desde hace tiempo. Conseguirán saber el por qué de los sucesos y seguir avanzando en todas las investigaciones.

Los muchachos siguen queriendo encontrar al cazador de lobos y necesitan la ayuda de Ricky para impedir que cumpla con el objetivo de acabar con la vida de Joel, que si se mantiene al lado de Leire puede ponerles a los dos en peligro. ¿Dejarán de verse para protegerse?