Ribero va solo al lugar y escala la torre de una antena enfrentándose a su miedo a las alturas y al vértigo que sufre. Tras un movimiento raro, cae al suelo en extrañas circunstancias. ¿Se ha caído solo o alguien lo ha ocasionado?

Tania piensa que ya no conoce a su marido al comprobar que puede caminar a buen ritmo, ordenar toda la casa mecánicamente y arreglar los muebles de la vivienda. María, por su lado, no deja de beber agua y a su lado todo se seca.

Pablo no comprende los milagros médicos que se están produciendo, ya que Ramón también está avanzando mucho. El médico abre investigación sobre Nacho, Ramón y María, mientras Esther se despierta con la sensación de hacer sentido una presencia.