El autobús es toda una trampa que va a recorrer todos los lugares salpicados por la corrupción política, pero con más sorpresas que ni siquiera Carreño tenía planeadas. Los hermanos Zabaleta serán los aliados de Andrea para intentar que nadie se entere del asunto del autobús.

En el vehículo, alguien ha colocado la madre de todas las bombas y Ximo tendrá que convertirse una vez más en el Mozart de la pólvora para que el artefacto no explote y no haya damnificados. ¿Lo conseguirá a tiempo? ¿Firmarán la paz Carreño y Ocaña?

Elena se da cuenta de que los resultados del test psicológico de Martín son muy negativos y decide utilizar la maquinaria de la base para rehacerlo, mientras Efe y Eñe se enfrentarán por el amor de Montse. ¿Quién ganará?