Durante una conversación con Belén, Víctor descubre que alguien les está espiando. Dentro del coche de la doctora, se encuentra un micrófono. ¿Quién lo habrá colocado ahí? ¿Habrá descubierto alguien más la verdadera identidad de Víctor? De ser así, tan sólo les quedaría dos opciones: apartar al detective del caso o identificar al espía y alejarlo de la investigación.

Sin embargo, toda la investigación da un giro de 180 grados cuando Sara Guzmán despierta, al fin, del coma. Ahora que se encuentra consciente, podrá hablar con la policía para identificar a la persona que la secuestró.  ¿Será la misma persona que se encuentra detrás de la desaparición de Catherine Le Monnier y el asesinato de Isabel Freire?

Por otro lado, la indagación en la muerte de Enrique Méndez continúa de forma paralela a la investigación principal. Si la policía encuentra la prótesis que puede relacionar a Miguel Manrique con el asesinato del marido de Isabel Freire, con quien el médico forense mantenía una relación extramatrimonial, lo detendrá inmediatamente. Así que Miguel se propone encontrarla antes que ellos. ¿Logrará ocultar la última prueba que lo puede inculpar o será más rápida la policía?

Para terminar, Sophie LeDuc, la comisaria francesa, solicita a Alain que investigue a uno de los trabajadores del hospital a escondidas de la policía española. ¿Por qué querrá ocultárselo al comisario Casas y a su equipo? ¿Obedecerá Alain o lo compartirá con Víctor? ¿Pillará la policía española a Alain antes de que ejecute el plan de su jefa?