Por su parte, Álex decide recurrir a un experto en la teoría de la memoria del corazón. Junto con Gabriel, comienza a encontrar el sentido de las imágenes que el corazón de Rodrigo le envía continuamente.

Incapaz de regresar a su puesto de trabajo, Blanca se encarga de una paciente de su marido que requiere una complicada cirugía. A pesar del apoyo incondicional que Blanca le muestra, Álex no puede evitar sentirse atraído por Marian, la viuda de Rodrigo.

Finalmente, Marian no asimila aún la muerte de su marido. Su hija adolescente, Mónica, no resulta de gran ayuda y su hijo pequeño, Javi, necesita a su padre. Lo peor vendrá cuando descubra que Rodrigo no murió de forma natural, sino que fue asesinado.