Una orden de captura contra Marcus destruye la incipiente historia de un nuevo amor. La guerra ha acabado y con ella vienen importantes cambios en el Gobierno español, entre ellos, el nombramiento de Beigbeder como nuevo ministro de Asuntos Exteriores, por lo que tiene que regresar a Madrid.

Junto a él, tendrá que irse también Rosalinda. Tras varios meses sin verse, finalmente Sira y Rosalinda logran encontrarse. No se trata de una visita social, sino todo lo contrario. Rosalinda encomienda a Sira una misión: deberá volver a Madrid con una nueva identidad.